"Erase una vez, tres reyes que partieron de un país lejano y siguieron a una estrella hasta llegar a un pueblecito que estaba al otro lado del desierto. Seguro que habéis oído hablar de ellos, se les conoce como los tres Sabios, los tres Magos, los tres Reyes y también por sus nombres: Melchor, Gaspar y Baltasar. Traían con ellos oro, incienso y mirra, como regalos para un niño recién nacido. Hubo, además, otro rey que también emprendió un largo y difícil viaje. Y, a diferencia de los otros, llegó demasiado tarde y con las manos vacías. Yo fui ese rey... El rey Mazzel. Yo fui el cuarto Rey."